Seguramente te has encontrado en una situación en la que te hubiese encantado silenciar a una persona porque te estaba poniendo la cabeza como un bombo o simplemente porque necesitabas silencio. Pues parece que a los expertos de Google también se les ha dado esa situación porque están desarrollando un sistema de inteligencia artificial capaz de analizar una conversación y dividir las voces para que podamos seleccionar lo que nos interesa.
Es decir, el usuario podrá así eliminar aquella voz que le moleste o no le permita escuchar lo que dice una tercera persona a golpe de un solo clic. Tal y como explica Google en su blog, el sistema funciona con cualquier tipo de vídeo y lo único que se requiere por parte del usuario es que seleccione en el vídeo la cara de la persona que quiere silenciar.
Tecnología basada en el “efecto cóctel”
Este proyecto que permite silenciar las voces de las personas está inspirado, según detalla Google, en el “efecto cóctel”. Una capacidad natural que tenemos los seres humanos que nos permite enfocar nuestra atención en una persona en concreto en un ambiente ruidoso y silenciar otro tipo de voces y sonidos.
Google pretende trasladar este “efecto cóctel” al mundo tecnológico a través de la inteligencia artificial bajo un modelo que han denominado Looking to listen at the Cocktail Party. Lo que hace es aislar una sola señal de voz de una mezcla de sonidos.
Más allá de silenciar la voz de una persona que no te gusta escuchar, este sistema permitirá obtener videoconferencias con mejor sonido, ofrecer retransmisiones en diferentes idiomas e incluso desarrollar mejores audífonos. También, permitirá editar los vídeos con mucho ruido de fondo y hacerlos así menos molestos de escuchar y más fáciles de entender.
De nuevo la ficción se convierte en realidad
Esta tecnología capaz de silenciar las voces de las personas como de si un bloqueo en una red social se tratase, ya fue presentada en la serie de Black Mirror. El capítulo especial de la serie con motivo de la Navidad a finales de 2014 contaba la historia de un hombre que bloquea a personas en la vida real del mismo modo que lo podemos hacer en WhatsApp.
Una nueva situación que demuestra que las predicciones de Black Mirror son más reales de lo que pensamos. Un nuevo caso en el que la ficción se convierte en realidad.